Hoy se celebra el Día del Judo en honor a su creador, Jigoro Kano, maestro japonés que revolucionó las artes marciales al demostrar que en el combate no importa el tamaño o la fuerza del oponente, sino saber cómo aprovechar la energía del otro.
El judo fue una de las primeras artes marciales en incorporarse al movimiento olímpico. Más que un deporte, es una disciplina que forma cuerpo y mente, y que exige un gran nivel técnico. Los judokas son reconocidos como luchadores completos, ya que el judo representa una forma distinta de entender la lucha y la superación personal.
Además, Zaira Rodríguez obtuvo una medalla en la categoría Senior. Ella contó cómo es su preparación diaria, destacando el compromiso de su sensei, quien entrena al grupo de lunes a viernes desde temprano. Zaira también resaltó que el judo es un deporte abierto a todas las personas, ya que se organiza por categorías: infantiles, principiantes y adultos, lo que permite que cualquiera pueda iniciarse y competir.
En judo, los avances se representan con los cinturones: se comienza con el blanco, luego siguen amarillo, naranja, verde, marrón y finalmente el negro, que requiere rendir un examen. A partir del cinturón negro, existen niveles superiores denominados danes.
Quienes deseen practicar pueden acercarse a la sede ubicada en Rosario Vera Peñaloza, donde funciona el dojo —palabra japonesa que significa “lugar de práctica”—. Allí también se enseñan técnicas de jiu-jitsu, enfocadas en el trabajo en suelo y llaves de brazos, muy recomendables para la defensa personal, especialmente en mujeres.
Actualmente, la escuela cuenta con más de 100 alumnos, y el espacio ya les queda chico, reflejando el crecimiento y la pasión por esta disciplina que no deja de sumar adeptos.









