El Gobierno prepara una serie de decretos -que saldrán desde este miércoles- y un paquete de leyes; el BCRA publicará el miércoles una “solución” para la deuda comercial de las empresas y la “bola de Leliq”
La motosierra de Javier Milei implicará no sólo una brutal baja del gasto público -de casi 3 puntos del PBI- sino también un aumento de impuestos a importaciones (PAIS) y también a las exportaciones (retenciones).
El ancla fiscal -creen- será inmediata: el déficit de 5,2% de PBI se eliminará en un año. A eso se sumará que el Banco Central (BCRA) anunciará este miércoles un plan para la deuda comercial de las empresas y los pasivos remunerados, con el que buscarán contraer al máximo la cantidad de pesos en la economía.
Además, luego de un salto del dólar a $800, se cuasifijará el tipo de cambio con un crawling de 2% mensual. La última pata del programa para bajar la inflación –que subirá en un primer momento- será la recesión.
Fuentes oficiales contaron además que habrá quitas de subsidios a la energía y trasporte desde febrero próximo, se eliminará la fórmula de movilidad jubilatoria, habrá una nueva moratoria, un blanqueo y subirán las retenciones de todos los productos al 15% (menos la soja, en un 30%). Habría una “reversión” de los cambios en Ganancias, y una iniciativa de “adelanto” del pago del impuesto a los Bienes Personales con una alícuota preferencial. Para contener a los más vulnerables, se anunciará una duplicación de la AUH y subirá 50% la Tarjeta Alimentar. Parte de estas definiciones se conocerán con una serie de decretos este miércoles. Algunas otras iniciativas deberán ser refrendadas por el Congreso.