Las elecciones bonaerenses dejaron más de una sorpresa y reconfiguraron un mapa que parecía definido. Contra todo pronóstico, el peronismo logró volver a ganar en la Cuarta y en la Segunda sección electoral, ambas con fuerte perfil agropecuario, donde no se imponía desde 2005. A esto se sumó el histórico triunfo en Tandil, donde el PJ no ganaba desde hacía 38 años.
En la Cuarta Sección, integrada por 19 municipios rurales del noroeste de la provincia, Fuerza Patria consiguió el 40,2% de los votos. Detrás quedó La Libertad Avanza con 30,28% y en tercer lugar Somos Buenos Aires con 19,95%, con el 94,47% escrutado. Se trata de un resultado que desarmó los planes de la alianza violeta, que había apostado fuerte en el territorio.
El peronismo se impuso en 15 de los 19 distritos de la Cuarta. Logró picos altos como en General Pinto (57%), Carlos Tejedor (56,8%), Rivadavia (55%) y superó el 49% en Chacabuco y Alberti. Los libertarios solo pudieron quedarse con Trenque Lauquen, General Villegas, 9 de Julio y Lincoln. La lista camporista encabezada por Diego Videla devolvió al PJ una alegría que no tenía desde 2005.
En contraste, Somos Buenos Aires apostó fuerte con figuras locales como el intendente de Junín, Pablo Petrecca, y el jefe comunal de Chivilcoy, Guillermo Britos, que ocupaban lugares destacados en la boleta seccional. Representaban juntos el 27% del padrón de la Cuarta, pero quedaron terceros, muy lejos de la pelea central.
La Segunda Sección Electoral, en el norte bonaerense, también dio un giro inesperado. Fuerza Patria alcanzó el 35,45%, contra el 29,84% de La Libertad Avanza, con el 86% de las mesas escrutadas. El PJ no ganaba allí desde 2005, cuando la lista era encabezada por Ismael Passaglia. En esta oportunidad, el candidato fue Diego Nanni, que le dio la victoria al peronismo después de años de derrotas.
Mientras tanto, la propuesta de los hermanos Manuel y Santiago Passaglia bajo el sello “Hechos” se ubicó en tercer lugar con 23,93%. Paradójicamente, su padre había sido el último en ganar la sección para el peronismo en 2005.
En la Primera Sección, el triunfo de Gabriel Katopodis consolidó otro dato llamativo: por primera vez, la cantidad de electores de esa región superó a la Tercera, el clásico bastión del PJ. Katopodis sacó 47,29%, diez puntos arriba de Diego Valenzuela, el ex PRO que se sumó a los libertarios.
La otra cara fue la Sexta Sección, segundo bastión libertario, donde Oscar Liberman ganó con 41% frente a Alejandro Dichiaria de Fuerza Patria, que quedó en 34%. Lo mismo pasó en la Quinta Sección, donde el intendente marplatense Guillermo Montenegro se impuso con poco más del 41%, frente al 37,5% de Fernanda Raverta.
Uno de los batacazos locales fue en Tandil, donde el camporista Rogelio Iparraguirre se quedó con la elección por apenas 300 votos, con 35,7% contra 34,9% del libertario Gonzalo Santamarina. El radical Miguel Lunghi, tras más de dos décadas de hegemonía, perdió por primera vez una elección. “Estamos sorprendidos por el resultado”, reconoció Julio Elichiribehety, jefe de gabinete local.
Otro dato que no pasó inadvertido: en los distritos que visitó Javier Milei, los libertarios sufrieron derrotas fuertes. En Junín, donde el Presidente encabezó un acto central, LLA terminó tercera con 22%, detrás del peronismo y de Somos. En Moreno, la lista impulsada por la intendenta Mariel Fernández ganó 54 a 29 y en Lomas de Zamora la caída fue por casi 30 puntos. En La Plata, el hermano del vocero presidencial, Francisco Adorni, perdió frente al peronismo por siete puntos.
Fuente: Data Clave









