Cuando el Gobierno de Javier Milei firmó el Pacto de Mayo con los gobernadores, comprometió a las provincias para que se alinearan en ese sentido.
Sin embargo, hay pocas que estarían yendo en esa dirección.
Córdoba es una de ellas, según un trabajo del Iaraf (Instituto Argentino de Análisis Fiscal) de Nadin Argañaraz.
La provincia comandada por Martín Llaryora bajó su gasto (en relación al PBI) en mayor medida que el Gobierno nacional. Su reducción fue del 7,8% en 2024, mientras que el Estado nacional recortó en un 7,2%.
«Córdoba hizo esta reducción del gasto manteniendo ciertos niveles de obra pública e inversión social», marca Argañaraz, en contraste con la administración del Poder Ejecutivo Nacional, que achicó la obra pública a niveles récord y recortó beneficios en ciertas prestaciones sociales.